El 20 de mayo es el Día Internacional del Whisky, que se celebra el tercer sábado de este mes desde el año 2012. La jornada fue promovida por Blair Bowman, un escritor y catador de bebidas escocés que hace años se dedica a asesorar a bares y a empresas sobre coctelería.
Creado en las abadías de Escocia en el siglo XV, el whisky comenzó a consumirse en las islas británicas como aguardiente, y luego se extendió al resto del mundo. Esta inigualable receta se obtiene por la destilación de la malta, que se fermenta de distintos cereales como el trigo, el centeno, el maíz y la cebada.
Entre perfumes y toques de autor que varían según el proceso y los ingredientes, cada botella contiene una amplia gama de sabores que deleitan a paladares de todo el planeta. Para reflexionar acerca de la importancia que tiene esta bebida a nivel mundial, Infobae conversó con 11 bartenders y especialistas, quienes dejaron, además, sus secretos a la hora de servirlo tanto en cócteles como puro.
En primer lugar, el bartender Agustín Zenoni, quien representó anteriormente a Argentina en el Mundial de Coctelería, aportó: “El whisky es una bebida muy noble a la que hay que respetarle la historia y sus distintos tipos por igual, ya que cada país que la produce tiene un misticismo a la hora de elaborarla”.
Zenoni consideró que el whisky puede utilizarse tranquilamente para lograr cócteles distintivos. “Al momento de mezclarlo, estamos saliendo de un concepto previo de que el whisky solo se bebé puro o en cocteles clásicos de gran graduación alcohólica. Sin embargo, creo que, al tener tantos estilos de sabor, se pueden concretar cócteles de distintos perfiles”.
Bajo estos preceptos, el bartender dejó una de sus recetas más aclamadas: el cóctel R3 Evolución.
Ingredientes:
-Whisky.
-Cold brewde café colombiano (café preparado en frío).
-Óleo de ananá.
-Papel de ananá.
Mezclar y servir. Este cóctel con whisky se puede probar en la barra que lidera Zenoni, ubicada en el bar Chinchibira, en Rosario.
En tanto, Roberto Cardini, fundador de Sede, unbar de whisky ubicado en el corazón del barrio porteño deChacarita, explicó la razón de ser de su proyecto. “La idea es acercarle esta bebida a la gente joven, esencialmente. Vinimos a patear el tablero y a romper el prejuicio que hay sobre el whisky, que se suele pensar como una bebida conservadora y señorial solo para adultos grandes”. Esto último se anticipa en la puerta del lugar con una placa de mármol que da la bienvenida y dicta. “Aquí murió la mirada conservadora del whisky”.
Desde La Boutique, una whiskeria y regalería con sede en City Bell, Gabriel Gibilbank apuntó: “Relaciono al whisky con un momento de intimidad y de complicidad. Pese a lo que suele pensarse, es una bebida que se lleva muy bien con todo el mundo, tanto principiantes como expertos. No hay una sola forma de tomarlo y por eso me parece también que es muy accesible. En coctelería, es el corazón de muchos cócteles clásicos que ya forman parte de la historia y la cultura del buen beber; esa es otra de las grandes ventajas del whisky: hace que los cócteles se conviertan en clásicos instantáneamente”.