Ni siquiera en el Mundial de Qatar se le vio un partido tan deficiente a la Selección de Costa Rica. El primer partido contra Panamá en los cuartos de final de la Liga de Naciones fue un capítulo triste, desalentador y hasta vergonzoso, pero también un reflejo de dos realidades muy opuestas que obligan a poner los pies en la tierra.
Panamá dio el jueves un paso aparentemente decisivo para su clasificación a la próxima Copa América tras golear 3-0 a Costa Rica en su propia casa, en la ida de los cuartos de final de la Liga de Naciones de Concacaf.
Los goles de Michael Murillo, José Fajardo y Cecilio Waterman dejaron petrificadas las esperanzas costarricenses de romper la racha negativa que acumulan ante los panameños desde 2022.
Los panameños no tuvieron piedad del técnico argentino Gustavo Alfaro en su debut al frente del equipo tico y poco importó el traslado de sede que hizo Costa Rica del Estadio Nacional al Ricardo Saprissa en busca de algún tipo de ventaja.
Todo el ambiente festivo de la afición costarricense en las gradas se apagó apenas en tres minutos, con el gol de tiro libre de Murillo que dejó con poco por hacer al portero tico Kevin Chamorro.
Por ser temprano en el partido, Costa Rica intentó presionar a Panamá en busca del empate, pero el equipo dirigido por Thomas Christiansen apenas y se inmutó, guardando siempre su orden defensivo y salida rápida en contraataque mediante las habilidosas piernas de Adalberto Carrasquilla.
En uno de esos intentos infructuosos de Costa Rica, Panamá lanzó en contragolpe a Fajardo quien con remate cruzado venció a Chamorro a los 28 minutos.
Con dos goles en contra, Costa Rica trató de no decaer en el juego y tuvo cerca el descuento con un remate de Jimmy Marín que se estrelló en el poste izquierdo defendido por Orlando Mosquera.
El segundo tiempo no trajo ningún cambio importante en la dinámica, con una selección costarricense que mostró muchos deseos pero pocos recursos, mientras que Panamá se dedicó a administrar el resultado a la espera de una nueva oportunidad en el ataque.
A los 59, esa oportunidad de ataque llegó para los panameños en un nuevo contragolpe, cuando otro pase preciso de Carrasquilla puso a Waterman frente al portero Chamorro y derivó en el 3-0 que se hizo definitivo.
La decepción costarricense fue tal, que el Ricardo Saprissa que se suponía debía ser una fortaleza infranqueable para el equipo costarricense, terminó coreando el “ole” cuando los panameños pasaban el balón, en reproche a los suyos por la desteñida presentación.
El segundo juego de esta serie de cuartos de final de la Liga de Naciones de Concacaf se jugará el 20 de noviembre en Ciudad de Panamá, donde de mantener la ventaja, los canaleros podrán sellar su pase a la Copa América 2024 y seguir avanzando en el torneo regional.