Según el texto proporcionado, Estados Unidos es “la casa de Tesla”, la marca icónica de autos eléctricos del mundo. A pesar de la popularidad de Tesla y del crecimiento de la industria de vehículos eléctricos, la adopción de autos eléctricos por parte de los estadounidenses se ve obstaculizada por preocupaciones como el costo, la autonomía y la disponibilidad de puntos de carga. El estudio de la Asociación Estadounidense del Automóvil destaca que la mayoría de los estadounidenses consideran que es “improbable o muy improbable” que compren un vehículo eléctrico próximamente, y prefieren los autos híbridos como una alternativa más aceptable en términos de costos y practicidad.
La industria automotriz está experimentando una transición significativa hacia la electrificación de los vehículos, con un enfoque creciente en los autos eléctricos, pero los desafíos de costos y infraestructura siguen siendo barreras para la adopción masiva de estos vehículos en Estados Unidos. Los fabricantes chinos están aprovechando esta oportunidad y generando preocupación entre los fabricantes europeos, lo que ha llevado a decisiones como el aumento de los aranceles de importación en el mercado estadounidense.
En resumen, a pesar del avance de la tecnología de vehículos eléctricos, los desafíos relacionados con el costo, la autonomía y la infraestructura de carga están frenando la adopción masiva de estos vehículos en Estados Unidos, mientras que los autos híbridos siguen siendo una opción popular entre los consumidores preocupados por estos factores.