La comunidad educativa de la escuela El Buen Pastor, ubicada en el distrito de Arraiján, se ha pronunciado con urgencia ante la empresa eléctrica Naturgy, exigiendo mejoras significativas en la calidad del servicio. Los constantes apagones y fluctuaciones de voltaje han generado serios daños en los equipos de la institución, incluyendo acondicionadores de aire y computadoras, lo que ha afectado negativamente el desempeño académico de los estudiantes.
“No podemos vivir más así”, señalaron los docentes, quienes manifestaron que la situación actual ha llevado a la suspensión de clases cada vez que ocurren apagones, obligándolos a buscar alternativas como la educación virtual para poder continuar con el proceso de enseñanza.
Pese a que la administración de la escuela ha invertido $34 mil en una acometida eléctrica para intentar resolver el problema, aún no se ha realizado la instalación de un transformador de energía por parte de la empresa Naturgy. Esta situación se ha prolongado por más de tres años, generando frustración y descontento en la comunidad escolar.
La semana pasada, la situación tomó un giro crítico cuando personal de la Autoridad de los Servicios Públicos (ASEP) inició un operativo de fiscalización en la red eléctrica de Panamá Oeste, descubriendo deficiencias alarmantes que impactan a los usuarios de la región.
El pasado martes, como parte de sus acciones de protesta, docentes y personal administrativo de la escuela El Buen Pastor se manifestaron pacíficamente frente a las oficinas de Naturgy, demandando una solución inmediata y efectiva a las problemáticas que enfrentan diariamente.
La comunidad educativa hace un llamado a Naturgy para que atiendan urgentemente esta situación y garanticen un servicio eléctrico adecuado que permita el normal desarrollo de las actividades escolares y el bienestar de todos los estudiantes.