El presidente de Israel, Isaac Herzog, instó este domingo al Gobierno de su país a alcanzar un acuerdo con Hamas que permita el rescate de los 116 rehenes que el grupo terrorista mantiene cautivos en la Franja de Gaza desde hace nueve meses, cuando estalló la guerra.
“La nación entera quiere su regreso y una mayoría absoluta apoya un acuerdo que incluya (la liberación de) rehenes. El deber del Estado es devolverlos y eso está en el centro del consenso”, indicó Herzog en un mensaje publicado en la red social X.
“Nuestro compromiso con la devolución de los secuestrados es absoluto y supremo. El pueblo de Israel no los olvida ni por un momento. En cada hogar y familia, en cada sinagoga, en cada comunidad, en cada evento público y privado, escuchamos la preocupación por los secuestrados, la oración y el grito por su rápido regreso a casa”, añadió.
Este mensaje se produce al cumplirse nueve meses de guerra y mientras Israel estudia un nuevo acuerdo de tregua con Hamas que permita la liberación de los rehenes, y que será discutido en los próximos días en Egipto por los principales mediadores, Estados Unidos y Qatar.
Sin embargo, los ministros del ala dura del Gobierno israelí, Itamar Ben Gvir (Seguridad Nacional) y Bezalel Smotrich (Finanzas), expresaron su desacuerdo a pactar con los terroristas y amenazaron con abandonar la coalición si Israel llega a un acuerdo con Hamas.
Nueva jornadas de manifestaciones
En tanto, la sociedad israelí está cada vez más desesperada por recuperar a sus seres queridos secuestrados en Gaza.
Este mismo domingo se convocó una nueva jornada de manifestaciones en todo el país, incluyendo grandes ciudades como Tel Aviv y Jerusalén, que busca llevar a un millón de personas a las calles para exigir un acuerdo de liberación de rehenes en Gaza y la disolución de la Knéset (Parlamento israelí) para convocar elecciones anticipadas.
La actual guerra entre Israel y Hamas -que controla de facto la Franja de Gaza- estalló el 7 de octubre de 2023 tras un ataque del grupo terrorista que incluyó el lanzamiento de miles de cohetes y la infiltración de numerosos milicianos que mataron a unas 1.200 personas y secuestraron a otras 251 en los poblados israelíes cercanos a la Franja de Gaza.
De esos 251 secuestrados, 116 continúan cautivos en Gaza aunque 42 habrían muerto, según estimaciones oficiales de Israel, una cifra que se eleva a más de 70 según las estimaciones de Hamas.
El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, se niega a poner fin a la guerra hasta que haya conseguido “todos los objetivos” bélicos, que son destruir a Hamas y recuperar a todos los secuestrados.
De su lado, Hamas asegura que no aceptará ningún pacto que no conduzca al cese definitivo de las hostilidades.
A lo largo de esta guerra, la más prolongada desde la fundación del Estado de Israel en 1948, solo se ha logrado un acuerdo de tregua de una semana a finales de noviembre, que permitió liberar a 105 rehenes a cambio de 240 prisioneros palestinos.