El Gobierno de Panamá anunció este lunes que llamó a consultas a su embajador en Nicaragua, José de Jesús Martínez, como parte de la crisis diplomática que mantienen con el gobierno de ese país.
“La República de Panamá se siente verdaderamente afectada en su integridad por la actitud permisiva de la República de Nicaragua (…). El señor Ricardo Alberto Martinelli Berrocal ha mantenido y desplegado acciones desde su sede diplomática en Panamá con fines político partidistas”, explica el Ministerio de Relaciones Exteriores panameño en un comunicado publicado este lunes.
Martinelli, quien tenía aspiraciones presidenciales para este período electoral, solicitó asilo político al Gobierno del presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, al argumentar que era sujeto de persecución política y que temía por su vida, luego de que se le dictó una orden de captura por un caso de blanqueo de recursos públicos. Él se ha declarado inocente en tribunales.
El gobierno nicaragüense le otorgó asilo a Martinelli, quien desde febrero está en la sede de la embajada en la capital panameña. Después del otorgamiento del asilo, la cancillería nicaragüense solicitó al Gobierno de Panamá un salvoconducto para que Martinelli pudiera salir de la embajada hacia territorio nicaragüense, pero no se le otorgó debido a que Martinelli enfrenta cargos y es requerido por la Justicia para purgar la condena que tiene en su contra.
CNN consultó tanto al equipo de Martinelli como al Gobierno de Panamá para pedir un comentario de este anuncio, sin que hasta el momento se tenga una respuesta. También CNN consultó al gobierno de Daniel Ortega sobre este anuncio sin que Nicaragua haya respondido.