Hay creciente preocupación en la comunidad médica internacional después de que la Comisión Nacional de Salud de China reportara un incremento este mes de enfermedades respiratorias y neumonías que afectan principalmente a los niños. Los hospitales de Beijing y del norte del país lidian con una oleada de niños enfermos en un momento en que llega el invierno en China después del relajamiento de los estrictos controles por el covid-19 hace casi un año. ¿Qué ocurre?
La Organización Mundial de la Salud (OMS), solicitó a las autoridades de China información epidemiológica y clínica, así como resultados de laboratorio de los grupos afectados. La OMS preguntó por “brotes notificados de neumonía no diagnosticada en niños”, citando un mensaje del sistema de vigilancia de código abierto del Programa de Monitoreo de Enfermedades Emergentes de la Sociedad Internacional de Enfermedades Infecciosas, conocido como ProMED.
China dijo a la OMS que la actual situación se debe al levantamiento de las restricciones por la pandemia y a la circulación de patógenos como la influenza, el virus respiratorio sincitial (VRS) y el que causa el covid-19.
Los científicos chinos creen que las restricciones por la pandemia crearon una especie de “brecha de inmunidad” que llevó a que algunas personas fueran más vulnerables a la infección cuando dejaron de tomar precauciones. Eso es lo que ocurrió el otoño pasado en Estados Unidos, por ejemplo, con un aumento temprano de los casos de VSR entre los niños.
La situación en los hospitales del norte de China
En algunos hospitales infantiles de las principales ciudades del norte de China, los tiempos de espera para ver a los médicos se extienden durante horas y hay cientos de pacientes haciendo cola, según han reportado tanto CNN como medios de comunicación estatales y redes sociales chinas.
En las últimas semanas, los padres chinos se han quejado en las redes sociales de la situación de hacinamiento en los hospitales, donde los niños tardan horas en ser atendidos por un médico antes de tener que esperar más para hacerse un análisis de sangre o recibir un goteo intravenoso.
Un funcionario del Hospital Infantil de Beijing declaró el martes a los medios de comunicación estatales que la media actual de más de 7.000 pacientes diarios “supera con creces la capacidad del hospital”. El mayor hospital pediátrico de la cercana Tianjin batió un récord el sábado, al recibir a más de 13.000 niños en sus servicios ambulatorios y de urgencias, según un medio estatal local.
Dado el relativamente subdesarrollado sistema de atención primaria de China, los enfermos suelen acudir a los hospitales o a los servicios de urgencias como primer punto de contacto. Estas instalaciones pueden saturarse durante las temporadas altas.
Las autoridades sanitarias nacionales de China y los funcionarios de los hospitales han instado repetidamente a los padres a que no lleven a los niños directamente a los grandes centros pediátricos, sino que los lleven a otros centros de salud que ofrezcan atención primaria o servicios generales.
La Comisión Nacional de Salud (NHC) advirtió este jueves a los padres que los grandes hospitales podrían tener “largos tiempos de espera y un alto riesgo de infecciones cruzadas”, y les dirigió a otro tipo de instalaciones para el triaje.
En un comunicado, la NHC señaló que había dado instrucciones a “todas las localidades” para que reforzaran sus sistemas de gestión y tratamiento de casos, incluida la identificación de casos graves entre la afluencia de pacientes.
Mientras tanto, el Gobierno municipal de Beijing volvió a publicar un artículo en los medios de comunicación estatales en el que aparecía un médico diciendo a los padres que no necesitaban pedir fluidos intravenosos “tan pronto como un niño tenga fiebre”.
La OMS dijo este jueves que las autoridades chinas informaron que “el aumento de las enfermedades respiratorias no ha causado que la carga de pacientes supere la capacidad de los hospitales”.
¿Enfermedades estacionales u otra cosa?
Las autoridades de salud de Beijing y otras grandes ciudades del norte de China dijeron que las enfermedades típicas de la estación, como la gripe y el VRS, así como la neumonía por micoplasma —una infección bacteriana que suele causar infecciones leves y afecta comúnmente a los niños— fueron las causas principales.
El aumento de los casos en el norte de China se produce en medio de un aumento de las infecciones respiratorias estacionales en todo el hemisferio norte, incluido Estados Unidos, donde el el virus respiratorio sincitial se está extendiendo a niveles “sin precedentes” entre los niños.
- China responde que el aumento de enfermedades respiratorias en niños se debe a gérmenes estacionales y no a “patógenos inusuales o nuevos”, según la OMS
Pero después tras hablar con funcionarios sanitarios y hospitalarios chinos el jueves, la OMS dijo que los datos indicaban un incremento de las consultas ambulatorias y los ingresos hospitalarios de niños debido a neumonía por micoplasma en mayo y enfermedades estacionales comunes VSR, adenovirus y virus de la gripe desde octubre.
“Algunos de estos aumentos se producen antes en la temporada de lo que se ha experimentado históricamente, pero no son inesperados dado el levantamiento de las restricciones de covid-19, como se ha experimentado de forma similar en otros países”, dijo la OMS.
La agencia añadió que las autoridades chinas dijeron que no había habido “ninguna detección de patógenos inusuales o novedosos o presentaciones clínicas inusuales”.
Los expertos externos que supervisan la situación también señalaron que no había pruebas de la presencia de un nuevo patógeno, pero pidieron a China que compartiera más información sobre la situación con el público.
“No creemos que haya un patógeno desconocido escondido en alguna parte”, declaró a CNN Jin Dongyan, virólogo de la Facultad de Ciencias Biomédicas de la Universidad de Hong Kong. “No hay pruebas de ello”.
Catherine Bennett, epidemióloga de la Universidad Deakin de Australia, dijo que la principal preocupación es si el aumento de la neumonía infantil indicara un nuevo patógeno, o nuevos niveles de gravedad de la enfermedad.
“Hasta ahora no hemos oído hablar de ninguna de las dos cosas”, dijo Bennett, quien añadió que era importante vigilar las fuentes de infección para descartar tales preocupaciones.