Amaneció con gastroenteritis y no podrá estar en el Metropolitano. Segundo caso en tres días. Había sido la gran sorpresa, volviendo sólo 30 días después de lesionarse.
Lo que menos se imaginaba Vinicius era que, después de acortar su recuperación hasta dos semanas, finalmente se perdería el derbi por una gastroenteritis. Pero no le queda otra. El brasileño ha amanecido con una molestia considerable y no podrá estar en el Metropolitano. Baja confirmada por el club, que de momento no llama a ningún recambio (Gonzalo jugó ayer en Mérida y estaría disponible, por ejemplo).
Se cae Vinicius, que había completado una recuperación vertiginosa. Extraordinaria. Hace exactamente 30 días sufrió una rotura en el bíceps femoral de la pierna derecha, esprintando en Balaídos. Los exámenes médicos confirmaron que la lesión era notable y apuntaban a seis semanas de baja. El calendario apuntaba al próximo parón… pero no. Finalmente han sido cuatro.
Con un entrenamiento
Algo fugaz. Porque Vinicius reapareció el viernes, haciendo sólo media sesión con el grupo. La parte suave: rondos, toques de balón controlados… no participó en el partidillo, donde la intensidad aumenta considerablemente. Síntoma inequívoco de prudencia. Pero ayer sábado sí hizo la sesión entera y para Ancelotti, fue suficiente. Convocado.
“El riesgo de recaída es cero”, apuntó en rueda de prensa. Confirmado que pese, a la inevitable falta de ritmo competitivo, se llevaba a su estrella al gran partido (con permiso de Bellingham). El brasileño, de jugar, habría tenido sólo unos pocos minutos. Pero finalmente no será ni eso. Una gastroenteritis le ha dejado sin derbi. Reaparecerá el miércoles, ante Las Palmas.
Segundo caso en tres días
Y es que el pasado viernes quien tuvo que ausentarse por gastroenteritis fue Bellingham, abandonando el entrenamiento en mitad de la sesión. En cuanto al inglés, tranquilidad absoluta. Se encuentra al 100% y su presencia esta noche no peligra. Ya entrenó ayer con el grupo y confirmó que todo queda en una anécdota. “¿Si hubiese faltado? Tampoco nos habríamos puesto a llorar… tengo a otros jugadores”, dijo Ancelotti para quitarle hierro al asunto. Pero hoy, a quien no tendrá seguro, es a Vinicius.